La enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE) se produce como consecuencia del reflujo patológico del contenido gástrico al esófago. En la actualidad constituye una de las patologías del aparato digestivo de mayor prevalencia y un motivo frecuente de consulta.
El paso del contenido ácido y de la pepsina del estómago al esófago es el factor clave en el desarrollo de la ERGE. El contacto del material refluido desde el estómago con la mucosa esofágica ocasiona los síntomas y las lesiones características de esta enfermedad. El número de enfermedades o de síntomas derivados de ERGE es muy elevado, pueden afectar al árbol respiratorio, al área otorrinolaringológica y a la cavidad oral.
El manejo del tratamiento de ERGE debe ser multidisciplinario. Los objetivos serán revertir el infiltrado inflamatorio y prevenir las complicaciones de la enfermedad. Independientemente del tratamiento farmacológico es necesario el tratamiento dietético nutricional de manera individualizada, el cual estará enfocado en eliminar todos los posibles desencadenantes antigénicos de los alimentos que podrían estimular una respuesta inmune. Las recomendaciones deberán estar realizadas por un profesional en nutrición.
Dado que la ERGE es una enfermedad crónica y recurrente, una vez obtenido el control inicial de la enfermedad es necesario establecer estrategias nutricionales terapéuticas a largo plazo con el objetivo de evitar la reaparición de los síntomas y de prevenir la aparición de complicaciones,